miércoles, 3 de septiembre de 2008

HISTORIA DEL ARTE UNIVERSAL

MIGUEL ANGEL BOUNARROTI

Introducción a uno de los genios del Renacimiento italiano: Miguel Ángel Buonarroti (1475 -1564)

David de Miguel ÁngelArquitecto, pintor y, ante todo, escultor, Miguel Ángel es el máximo exponente de la larga lista de ingenios individuales que el Renacimiento italiano alumbrará. Asimilable en sus inicios a la corriente del Cinquecento, en su magnífica obra es apreciable, casi desde los comienzos de la misma, una potente manifestación de los sentimientos que derivará en monumentales y poderosas figuras por completo manieristas (no sin motivo, se acuñará el gráfico término "terribilitá" para describirlas).

Vida y obra de Miguel Ángel Buonarroti

En Caprese, provincia de Arezzo, nace Miguel Ángel en el año de 1475, en el seno de una familia noble: los Buonarroti. Ya desde pequeño su vocación queda manifiesta, tomando su padre finalmente la decisión de enviarlo a formarse al taller del pintor Domenico Ghirlandaio. Sin embargo, y a pesar de que con dicho maestro su aprendizaje en el campo del dibujo es indiscutible, será en la escuela creada por los Médici en el Jardín de San Marcos donde Miguel Ángel se revele realmente como el gran escultor que llegará a ser.

Es en este ambiente donde va a entrar en contacto por primera vez con el conocimiento de obras legadas por la Antigüedad clásica, resultando éste un factor decisivo en su producción posterior. Pronto despuntará entre sus coetáneos, llamando la atención de Lorenzo de Médici, quien desde este momento y hasta su muerte se convertirá en mecenas y admirador del genio miguelangelesco. De esta etapa inicial datan diversos encargos que algunos amigos realizarían al artista, además de lo que habrían sido sus "falsificaciones artísticas".

Es a la muerte de su protector cuando Miguel Ángel inicia verdaderamente su trayectoria profesional, surcada por diversos viajes e importantes encargos. Tras una estancia en Bolonia en 1494, donde dejará esculpido un ángel para Santo Domingo de Guzmán y descubrirá el trabajo de Jacobo Della Quercia, regresa nuevamente a Florencia por un breve lapso de tiempo antes de iniciar su primer viaje a Roma. En dicha ciudad, donde permanece en esta ocasión entre los años de 1496 y 1501, va a realizar su famosísima, delicada y perfecta Piedad del Vaticano (obra de la que el artista, ya en vida, se sentía especialmente orgulloso, como demuestra el hecho de que la reconociera con su firma, circunstancia única en su producción).

De vuelta en Florencia, Miguel Ángel realizará una serie de obras "menores" (caso de los tondos ejecutados para Tadeo Taddei y Bartolomeo Pitti o el San Mateo para Santa Maria dei Fiore), siendo lo más destacable de entre las piezas que va a llevar a cabo en este periodo su monumental estatua del David (1502-1504), obra cumbre de todo el arte imitativo de la Antigüedad por lo que de perfección en la ejecución, belleza en la forma y originalidad en la manera de abordar la tipología posee.

Pero Miguel Ángel no es tan sólo escultor (aunque así lo habría deseado el artista en vida), acometiendo, por estas fechas asimismo, el encargo realizado por Piero Soderini de decorar con un episodio de la guerra de Pisa parte de la Sala Grande del Consejo de Florencia, en la que ya estaba trabajando Leonardo da Vinci. El cartón de esta obra, maestro de un sinnúmero de posteriores artistas, mostraría ya la tendencia a la dramatización y tensión de los cuerpos que posteriormente se apreciará en su obra pictórica cumbre, la Capilla Sixtina.

Moises de Miguel Ángel.  Escultura del Cinquecento

Varios serán los encargos en este periodo que mantendrán a Miguel Ángel alejado de dicho proyecto funerario, entre ellos la decoración de la Capilla Sixtina, solicitada por el Papa Julio II igualmente.

Creación de Adán. Capilla Sixtina

Miguel Ángel iniciará los trabajos en la bóveda de la capilla en 1508 y los finalizará en 1512 (posteriormente, en 1534, habiendo recibido el encargo de pintar la pared de la misma, ejecutará un manierista Juicio Final); a pesar de la energía que el genio derrochaba en cada uno de los proyectos que llevaba a cabo, éste en concreto puede dar buena idea de la fortaleza de su carácter, de su capacidad y de su determinación. Catorce años pasó pintando sólo, creando este ingente y complejo universo bíblico, repleto de belleza, perfección y terribilità.

En su vejez (1546) se hará cargo de otro importante proyecto: la finalización de las obras de la basílica de San Pedro del Vaticano, cuya cúpula se convertirá posteriormente en paradigma a seguir en buena parte del mundo.

Cúpula de San Pedro del Vaticano. Obra proyectada por Bramante y rematad por Miguel Ángel

Básicamente, Miguel ángel tomará el plan trazado por Bramante y lo mejorará visualmente mediante la supresión de las torres laterales y la modificación de perfiles, permitiendo que la cúpula se erija en eje central de la composición.

OBSERVAR EL SIGUIENTE VIDEO

No hay comentarios: